Ciudad de México, 30 de junio de 2025.- Cada etapa de la vida tiene sus preguntas clave. Para el universitario, esas preguntas giran en torno a su identidad, su propósito y su lugar en el mundo. ¿Quién soy? ¿Qué quiero lograr? ¿Cómo puedo hacerlo? En este contexto, el papel del asesor universitario se vuelve crucial: acompañar al alumno en su proceso de autoconocimiento es, quizás, una de las tareas más valiosas de la vida universitaria.
Con esta convicción, SMART Center de la Universidad Panamericana ha desarrollado la capacitación Herramientas para la asesoría universitaria: autoconocimiento.
Dicha capacitación es busca formar a los asesores para que comprendan a profundidad el momento vital por el que atraviesan los estudiantes, desde sus dimensiones física, emocional y profesional, y se reconozcan también a sí mismos como adultos significativos en ese camino.
“No se puede acompañar bien sin conocerse primero. Y no se puede guiar sin entender de dónde parte el otro”, afirma SMART Center.
Conexión y apoyo
Durante esta capacitación, los asesores exploran tests y herramientas prácticas que ayudan a identificar fortalezas, retos, estilos de aprendizaje, tipo de carácter y áreas de mejora tanto en el alumno como en ellos mismos. Este doble ejercicio (ver al otro con claridad y verse a uno mismo con honestidad) permite construir un puente real de conexión y apoyo.
Uno de los recursos clave abordados es el DPI, una herramienta rica en información que puede ser el punto de partida para personalizar el acompañamiento. A través del DPI, el asesor puede saber qué tan seguro se siente el alumno con sus hábitos de estudio, cómo es su nivel de comprensión lectora, cuáles son sus habilidades y en qué áreas siente que necesita mejorar.
Este diagnóstico, lejos de ser un simple dato administrativo durante el propedéutico, se convierte en una brújula para orientar mejor la asesoría.
Autoconocimiento como herramienta académica y guía
Además, la capacitación incluye un módulo sobre caracterología, que permite entender distintos tipos de carácter y cómo se manifiestan en la universidad. Reconocer estas diferencias ayuda a identificar no solo posibles desafíos, sino también potenciales que a veces ni el propio alumno alcanza a ver.
Pero el autoconocimiento no es solo una herramienta académica, es una guía para la vida. Por eso, esta capacitación también mira hacia adelante, ofreciendo una visión de las tendencias del futuro, para que el asesor pueda hablar con el alumno de lo que viene: profesiones emergentes, desarrollo de habilidades blandas, valor de la adaptabilidad y aprendizaje continuo.
Acompañar al alumno en este viaje no es simplemente parte de la función del asesor. Es una vocación. Es estar presente mientras el otro va descubriendo de qué está hecho, qué le apasiona, cómo reacciona ante los desafíos y qué necesita para dar su siguiente paso.
Los asesores que han tomado esta capacitación destacan que el proceso de autoconocimiento también los transforma a ellos, permitiéndoles redescubrirse como guías más empáticos, preparados y humanos.
SMART Center invita a todos los asesores que no hay vivido esta experiencia a dar el paso. Porque conocerse es el primer paso para crecer y crecer juntos, asesor y alumno, es la esencia de nuestra misión institucional.
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